Esta receta de ensalada griega es una deliciosa y refrescante mezcla de sabores mediterráneos. Está compuesta por una base de tomates jugosos y pepinos crujientes, acompañados de cebolla roja picante y pimiento verde. El queso feta desmenuzado aporta un sabor salado y cremoso, mientras que las aceitunas kalamata añaden un toque de intensidad.
Receta de Ensalada Griega
La ensalada griega es una mezcla refrescante de tomates, pepinos, cebolla roja, pimiento verde, queso feta y aceitunas kalamata, aderezada con aceite de oliva, jugo de limón y orégano. Una combinación deliciosa de sabores mediterráneos en cada bocado.
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Porciones15
minutos0
minutes300
kcalIngredientes
3 unidades de Tomates medianos, cortados en rodajas o trozos
1 unidad de Pepino grande, pelado y cortado en rodajas o trozos
1 unidad de Cebolla roja pequeña, cortada en rodajas finas
1 unidad de Pimiento verde, cortado en rodajas finas
200 gramos de Queso feta, desmenuzado
20 unidades de Aceitunas kalamata
2 cucharadas Aceite de oliva virgen extra
1 cucharada Jugo de limón
1 cucharadita Orégano seco
Sal y pimienta al gusto
Hojas de lechuga (opcional)
Instrucciones
- En un tazón grande, combina los tomates, el pepino, la cebolla y el pimiento verde.
- Agrega las aceitunas kalamata y el queso feta desmenuzado. Si deseas una presentación más bonita, puedes colocar las aceitunas y el queso feta por encima.
- En otro recipiente pequeño, mezcla el aceite de oliva, el jugo de limón, el orégano, la sal y la pimienta. Bate bien para combinar los ingredientes.
- Vierte el aderezo sobre la ensalada y mezcla suavemente para asegurarte de que todos los ingredientes estén bien cubiertos.
- Si lo deseas, sirve la ensalada sobre una cama de hojas de lechuga para agregar un poco de frescura adicional.
- ¡Disfruta tu ensalada griega! Puedes servirla como plato principal o como acompañamiento de otros platos.
Notas
- Elige ingredientes frescos: Opta por tomates maduros, pepinos crujientes y verduras frescas de buena calidad para obtener el mejor sabor y textura en tu ensalada.
- Corta los ingredientes en trozos uniformes: Para una presentación atractiva y una distribución equilibrada de sabores, asegúrate de cortar los tomates, pepinos, cebolla y pimiento en trozos del tamaño deseado y similares entre sí.
- Prueba con diferentes variedades de queso feta: El queso feta es una parte fundamental de la ensalada griega, pero hay diferentes variedades disponibles. Puedes experimentar con distintos tipos para descubrir cuál te gusta más en términos de sabor y textura.
- Ajusta el aderezo a tu gusto: La receta básica sugiere aceite de oliva, jugo de limón, orégano, sal y pimienta, pero puedes ajustar las proporciones y los ingredientes según tus preferencias personales. Prueba diferentes combinaciones de aderezos para encontrar el equilibrio de sabores que más te guste.
- Sirve la ensalada fresca: La ensalada griega se disfruta mejor cuando se sirve fresca y a temperatura ambiente. Evita dejarla reposar durante demasiado tiempo antes de servirla para mantener la frescura de los ingredientes.
- Agrega un toque adicional: Si deseas añadir un poco más de sabor, puedes considerar agregar hojas de albahaca fresca picada, hojuelas de chile rojo, o incluso un poco de aceite de oliva extra por encima justo antes de servir.
Información nutricional
- Calorias 300kcal
- Carbohidratos 12g
- Proteina: 12g
- Grasas 20g
- Grasa Saturada: 8g
- Colesterol: 40mg
- Sodio: 700mg
- Fibra 4g
- Azucar: 7g
La ensalada griega y los beneficios para la salud
La ensalada griega, al estar compuesta principalmente por ingredientes frescos y saludables, ofrece diversos beneficios para la salud. Algunos de ellos incluyen:
- Nutrición equilibrada: La ensalada griega es una fuente rica de vitaminas, minerales y antioxidantes debido a los tomates, pepinos, cebolla roja, pimiento verde y aceitunas. Estos ingredientes proporcionan nutrientes esenciales para mantener un cuerpo sano.
- Hidratación: Los pepinos y los tomates presentes en la ensalada tienen un alto contenido de agua, lo que ayuda a mantener el cuerpo hidratado.
- Fibra dietética: Los vegetales presentes en la ensalada griega son una buena fuente de fibra, lo que ayuda a mejorar la digestión, promueve la saciedad y contribuye al mantenimiento de un sistema digestivo saludable.
- Salud cardiovascular: El consumo regular de aceite de oliva, que se utiliza como aderezo en la ensalada griega, se ha asociado con beneficios para la salud cardiovascular. El aceite de oliva contiene grasas saludables que pueden ayudar a reducir el colesterol LDL (colesterol “malo”) y promover la salud del corazón.
- Antioxidantes: Los tomates, pepinos y aceitunas kalamata en la ensalada son ricos en antioxidantes, que ayudan a proteger el cuerpo contra el daño causado por los radicales libres y contribuyen a la salud en general.
Es importante tener en cuenta que los beneficios para la salud pueden variar según los ingredientes utilizados, la cantidad de aderezo y las porciones consumidas. Además, es recomendable adaptar la receta a las necesidades y preferencias individuales.
Historia de la ensalada griega
La ensalada griega, conocida como “horiatiki” en griego, es un plato tradicional de la gastronomía griega que se ha convertido en un plato emblemático de la cocina mediterránea. Su historia se remonta a la antigua Grecia, aunque la versión moderna que conocemos hoy en día se consolidó a principios del siglo XX.
La ensalada griega es una combinación simple y deliciosa de ingredientes frescos y de alta calidad que reflejan la abundancia de la región mediterránea. Aunque puede haber variaciones en la receta según la región o el gusto personal, los ingredientes básicos suelen incluir:
- Tomates maduros y jugosos.
- Pepinos frescos y crujientes.
- Cebolla morada o blanca, cortada en rodajas finas.
- Aceitunas kalamata, que aportan un sabor salado característico.
- Queso feta griego, desmenuzado o en trozos.
- Orégano seco, una hierba aromática que realza el sabor de la ensalada.
- Aceite de oliva virgen extra, que se utiliza como aderezo principal.
- Sal y pimienta al gusto.
La ensalada griega se sirve típicamente como un plato fresco y refrescante, ideal para los cálidos días de verano. Es una opción popular tanto como acompañamiento ligero como como plato principal, especialmente cuando se le añaden ingredientes adicionales como pollo a la parrilla o falafel.
Aunque la ensalada griega ha sido parte de la dieta mediterránea durante siglos, su popularidad se disparó en el siglo XX con el crecimiento del turismo en Grecia y la difusión de la cocina griega en todo el mundo. Hoy en día, es ampliamente apreciada por su sabor fresco, sus ingredientes saludables y su simplicidad, y se encuentra en los menús de restaurantes mediterráneos y en los hogares de todo el mundo.
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