Los raviolis o ravioles son una pasta rellena de forma cuadrada o circular, originaria de Italia. En esta receta, los raviolis son caseros y están rellenos de una mezcla de espinacas frescas, queso ricotta y queso parmesano rallado. La masa de esta receta se hace con harina, huevos, sal y aceite de oliva, y se estira hasta que tenga un grosor de 1/8 de pulgada. Se corta en círculos, se rellena con la mezcla de espinacas y queso y se sella. Los raviolis se hierven durante unos 2-3 minutos en agua con sal hasta que estén al dente. Se sirven con una salsa de tomate o con mantequilla y salvia.
Raviolis de queso y espinaca
esta receta de Raviolis de queso y espinaca caseros rellenos , servidos con salsa de tomate o mantequilla y salvia. ideales para sorprender a tus seres queridos en una cena.
4
Porciones1
hora30
minutos5
minutos400
kcalIngredientes
2 Taza Harina
3 Und Huevos grandes
1/2 Cucharada Sal
1 Cucharada Aceite de oliva
2 Tazas Espinacas frescas, picadas
1 Taza Queso ricotta
1/2 Taza Queso parmesano rallado
1 Pizca Sal y pimienta al gusto
1 Poco Salsa de tomate o mantequilla y salvia para servir
Instrucciones
- En un tazón grande, mezcla la harina, los huevos, la sal y el aceite de oliva hasta que la masa se junte. Amasa la masa durante unos 5 minutos hasta que esté suave y elástica. Envuelve en plástico y deja reposar durante al menos 30 minutos.
- En otro tazón, mezcla las espinacas, el queso ricotta, el queso parmesano, la sal y la pimienta hasta que se mezclen bien.
- Estira la masa en una superficie enharinada hasta que tenga un grosor de 1/8 de pulgada. Utiliza un cortador de raviolis o un vaso pequeño para cortar la masa en círculos de 2 pulgadas de diámetro.
- Coloca una cucharada de la mezcla de espinacas y queso en el centro de cada círculo de masa. Dobla el círculo por la mitad y presiona los bordes para sellar. Asegúrate de sacar todo el aire de los ravioles.
- Hierve los raviolis en agua con sal durante unos 2-3 minutos o hasta que estén al dente. Sirve con salsa de tomate o con mantequilla y salvia.
Los raviolis y los beneficios para la salud
Pueden ser una buena fuente de carbohidratos complejos y proteínas. Además, si se preparan con rellenos saludables como las espinacas, pueden aportar vitaminas y minerales importantes, como vitamina A, hierro, calcio y ácido fólico. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los raviolis comerciales a menudo contienen una gran cantidad de sodio y grasas saturadas, por lo que es importante leer las etiquetas nutricionales y moderar su consumo. Preparar raviolis caseros con ingredientes frescos y saludables puede ser una forma más nutritiva de disfrutar de esta deliciosa pasta.
En cuanto a las calorías, esto dependerá de la cantidad de ingredientes utilizados y cómo se sirva la pasta. Sin embargo, una porción de raviolis (alrededor de 150 gramos) puede contener alrededor de 300-400 calorías.
El tiempo de preparación es de aproximadamente 1 hora y 30 minutos, y el tiempo de cocción es de unos 2-3 minutos.
Es importante tener en cuenta que el tiempo de preparación puede variar dependiendo de la habilidad del cocinero y la cantidad que se deseen preparar.
Historia de los Raviolis
Los raviolis son una variedad de pasta rellena que tiene sus raíces en la cocina italiana, específicamente en la región de Liguria, en el noroeste de Italia. Su historia se remonta a siglos atrás y está vinculada a la evolución de la pasta y a la influencia de las culturas que han pasado por la península itálica.
Los orígenes exactos de los raviolis son difíciles de rastrear, ya que la pasta rellena se ha consumido en diferentes formas en muchas culturas a lo largo de la historia. Sin embargo, lesta receta como los conocemos hoy en día, con su forma característica de pequeñas almohadas de masa rellenas, se desarrollaron en Italia durante la Edad Media.
Se cree que los raviolis fueron influenciados por las tradiciones culinarias árabes que llegaron a Italia durante la Edad Media, así como por la influencia de las culturas mediterráneas vecinas. Estos incluyen platos como el “mantı” turco, el “shalbāṭ” persa y el “raviolo” genovés, una variante temprana del ravioli moderno que se rellenaba con hierbas y queso.
Con el tiempo, estas preparaciónes se volvieron más populares y se diversificaron en toda Italia, adoptando diferentes rellenos y técnicas de preparación según la región. En algunas partes del país, se rellenan con carne, queso, verduras, pescado o mariscos, mientras que en otras regiones se prefieren rellenos más simples como espinacas y ricotta.
Los raviolis han sido parte integral de la cocina italiana durante siglos y se han convertido en un plato apreciado en todo el mundo. Hoy en día, se sirven en una variedad de formas y estilos en restaurantes italianos y se pueden encontrar en los estantes de las tiendas de comestibles en forma de pasta fresca o seca. Su versatilidad, sabor delicioso y textura reconfortante los convierten en un plato favorito para muchos amantes de la comida italiana.
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